La PNP apuesta por la Policía Comunitaria

Luis Luján Cárdenas Sociólogo 

Luego del exitoso Piloto de Seguridad Ciudadana Integral implementado en 2013 en el mirador El Pino –bajo el concepto de Policía Comunitaria–, que ha reducido en 90% la delincuencia, hoy la Policía Nacional del Perú reproduce esta iniciativa en el cerro San Pedro y otros lugares limeños de alta peligrosidad e inseguridad ciudadana.

La particularidad de esta nueva tendencia del servicio policial es la prevención con la activa participación ciudadana, bajo una visión holística e integral para el desarrollo y el progreso social. No puede combatirse el crimen y sus múltiples modalidades sin modernizar y optimizar el desempeño policial, y eliminar la pobreza y la miseria.

El plan policial de operaciones Recuperación del Asentamiento Humano Cerro San Pedro 2015, de la Región Policial Lima, tiene como objetivo “optimizar y fortalecer las actividades de seguridad ciudadana y operaciones policiales de prevención, protección, seguridad y control del orden público”.

Este plan especifica que “la seguridad ciudadana es un derecho humano fundamental y una condición sine qua non, es decir, necesaria y esencial, para elevar la calidad de vida de los ciudadanos e impulsar el desarrollo local y nacional”.

Pero hay un importante añadido en este megaoperativo iniciado oficialmente el 18 de marzo: el apoyo de la gerencia de Seguridad Ciudadana de la Municipalidad de El Agustino, a través de su eficaz y eficiente servicio de serenazgo (que renace como ave fénix de los escombros en el que fue dejado por la anterior administración municipal), lo que no se dio en El Pino, pues la Municipalidad de La Victoria mostró total desinterés.

La Policía Comunitaria demanda la ineludible alianza policía-gobiernos locales-empresa-comunidad, promoviendo la responsabilidad compartida. En el mirador El Pino tuvo fuerza gravitante el trabajo voluntario de un grupo de profesionales, denominado Sol Radiante, que desplegó una asesoría multidisciplinaria con ingenieros, abogados, sociólogos, politólogos, educadores e incluso militares. Hoy enfrentan un gran reto: la sostenibilidad de lo obtenido.

La innovación, la actitud y la voluntad de servicio; la metodología aplicada a una realidad parecida, pero no igual; la priorización de la prevención por la represión, siendo San Pedro un nido de avezados delincuentes; la sensibilización de una población que desde 1947, cuando invadieron el lugar, no conoce la asistencia policial; la logística, tecnología y el recurso humano necesario; la corrupción de malos fiscales y jueces; la lentitud del Estado y sus programas sociales; el tercer lugar en pobreza de San Pedro son algunos de los grandes retos y amenazas que enfrentará la Policía Nacional.

“Caminante no hay camino; se hace camino al andar”, dijo el poeta Antonio Machado.