Estado incauta el lujoso Ferrari F-12 que llegó desde Italia para Oropeza

Incautado. Auto Ferrari fue confiscado por la Conabi. Foto: Miguel Gutiérrez
Óscar Chumpitaz C.
Agentes de la Dirección Antidrogas inspeccionaron y realizaron una serie de peritajes al lujoso Ferrari F-12 Berlinetta de 245 mil euros que Gerald Oropeza López estuvo a punto de retirar de un almacén de aduanas.
El vehículo permanecía inmovilizado en los almacenes de la empresa Tramarsa, en el Callao.
De acuerdo al registro de ingreso, el Ferrari llegó al puerto el 31 de marzo, es decir, un día antes del ataque al Porsche blanco en el que viajaba Oropeza junto a otras tres personas.
Según constataron las autoridades, este auto de alta gama ingresó con un peso distinto al que tenía cuando se hizo la inspección, el 9 de abril. Esta diferencia hizo sospechar que el vehículo habría traído una carga adicional.
Ayer, desde muy temprano, agentes de la Dirandro y de la Comisión Nacional de Bienes Incautados (Conabi) ingresaron con un fiscal a los almacenes de Tramarsa.
Dos canes adiestrados olfatearon no solo el coche, sino el contenedor en el que había venido el auto desde Italia.
El resultado es mantenido en absoluta reserva. Luego de la inspección, el Ferrari fue incautado y pasó a disposición del Estado.
Hace una semana, la Conabi incautó un Porsche amarillo y un Audi rojo hallados en una cochera de Breña, frente al local de la empresa Sergero Sac.
El resultado es mantenido en absoluta reserva. Luego de la inspección, el Ferrari fue incautado y pasó a disposición del Estado.
Hace una semana, la Conabi incautó un Porsche amarillo y un Audi rojo hallados en una cochera de Breña, frente al local de la empresa Sergero Sac.
Se dice que el hombre más buscado por la Policía gastó más de medio millón de dólares adquiriendo carros lujosos con los que realizaba piques legales.
Oropeza López es investigado por el presunto delito de lavado de activos y ya se han incautado tres viviendas vinculadas a él o a sus empresas. No obstante, el cuestionado empresario pidió que se le considere como “testigo principal” en los hechos, incluso pidió protección policial.
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