Educación para el desarrollo

Al inicio del Año Escolar 2014, la prestigiosa revista The Economist pronostica que el Perú continuará a un ritmo de crecimiento superior al promedio de la región. Nuestro país alcanzará en el próximo quinquenio un aumento del 6% de su producto bruto interno.

Las razones que respaldan esta afirmación de la Unidad de Inteligencia para América Latina y el Caribe de esta revista se encuentran en la ola de inversiones en el sector primario de nuestra economía, así como en la dinámica de crecimiento que hoy tiene el país.

La expansión del mercado interno por la existencia de una robusta clase media, el aumento del poder de compra, las crecientes inversiones en el sector de infraestructura y el impulso de nuestras fortalezas en el sector minero y turístico gracias a un manejo macroeconómico profesional y responsable son algunas de las características atractivas de nuestra economía.

Este crecimiento económico a mediano y largo plazos debe complementarse con una serie de reformas que convierta al Perú en un país desarrollado, menos vulnerable al precio de las materias primas.

Debemos cumplir muchas tareas para conseguir dicho fin. Entre los trabajos pendientes se encuentra llevar la modernización del Estado a buen puerto para aumentar la eficiencia y eficacia de los servidores públicos. En forma específica se debe impulsar otras reformas como la de Salud, optimizar la regionalización  y la expansión de la base tributaria.

Pero, sobre todo, se debe mejorar el nivel de educación y la investigación. Ningún país ha podido desarrollarse solo aprovechando el buen precio de sus materias primas. Hasta los países que reciben grandes recursos por el petróleo deben preocuparse por impulsar su industrialización.

Así lo entendieron, por ejemplo, los países del sudeste asiático. El modelo exportador de productos con poco valor agregado pasó a un modelo de exportación de productos elaborados con alta tecnología. Para lograr este propósito, la base, sin duda, es la educación.

Por tal motivo, el Gobierno peruano tiene como una de sus principales metas elevar el nivel educativo no solo de los colegios, sino también de las universidades del país, con el fin de cerrar la brecha histórica entre lo que ha sido la educación tradicional y el desarrollo de las empresas. Para ello, en vez de competir, el Estado y la empresa privada deben ser los mejores socios.

Prueba de ello es que el Ministerio de Educación desea elevar las horas de clase. Por ejemplo, se planea una secundaria de tiempo completo. El alumno podrá tener un horario de ocho horas de estudio y actividades extracurriculares en 2,000 escuelas públicas el próximo año.

También es de interés mejorar la capacidad de los propios profesores. Para ello, se ha aprobado brindar 1,000 becas integrales para que los docentes se especialicen en maestrías en ciencias de la educación.

No habrá desarrollo sostenido en el país si nuestros estudiantes no se dedican más a carreras de ciencia y tecnología.  La experiencia de la India es también valiosa para nuestro país. Su modelo de desarrollo se basa en la exportación de productos de tecnología y de servicios al mundo. 

Sabemos que esto significa dar un tremendo salto, recién comenzamos a tener conciencia y estamos dando los primeros pasos. Solo así podremos ser más dueños de nuestro futuro y liberarnos de las fluctuaciones de los precios de las materias primas en el ámbito internacional.

Debemos luchar para que el crecimiento actual contenga la semilla del desarrollo sostenible.